Fontaniegos, ¿os imaginas la calle Mayor cubierta de toldos en verano, con la gente de compras, paseando o en la terracita de los bares que se animen a abrir?. Qué maravilla, qué vivo estaría el centro… Hay que refrescar el centro y calles colindantes estrechas en verano. En invierno, que es más largo, la calidez de la buena armonía llega de la mano de un buen café con entornao, un buen libro sentados en los bancos del paseo, plaza o alameda, con el único sonido del griterío de los críos en sus juegos y los pájaros revoloteando en la torre de la iglesia. ¿Se puede conseguir?... ¡se puede!.
¿Qué se puede hacer? Hay amagos, intentos de hacerlo, puestas en escenas que se acercan a este proyecto ilusionante. Como la “noche blanca”, un fin de semana espectacular. Desde la heladería los valencianos hasta la Alameda puede verse un bullicio de fontaniegos, forasteros, visitantes. La imagen produce un subidón de nostalgia de antaño. Cómo lograrlo. Con programaciones culturales, turísticas y gastronómicas (adaptadas a cada estación del año) en un caminar diario de todos los fontaniegos-as.
Pero tenemos que empezar por quitar los coches del centro. Es viable y posible. Podemos hacerlo. Lo han hecho en el centro de Sevilla e incluso carriles bici, (¡impensable hace unos años!). ¿No vamos a ser capaces en fuentes? Somos de pueblo, pero no torpes. Si fomentamos y ofertamos los bares o restaurantes en el centro, la gente se mueve. En fuentes hay lugares para todo el mundo.
Retomo esta idea de la peatonalización del centro después de haber leído dos artículos publicados estas semanas en el periódico Fuentes de Información. Hace unos años lancé esa misma idea con imágenes que trataban de recrear el ambiente que habría en un centro de Fuentes sin coches, cn toldos protegiendo del sol, con comercios y con gente. Claro que sí, entre todos tenemos que hacer un Fuentes más habitable y bonito.
Porque el pueblo de Fuentes se va del centro, cada día más lejos. A la Vía, la Urba, el barrio Doña Predes, Cascabeles, Gim y quien sabe a dónde más. No hay calle que pise en Fuentes sin encontrarme con casas cerradas, vacías y derruidas. Qué cierto es lo que dice Fuentes de Información en esos dos artículos. El titular que sigue lo escribí en enero de 2017, pero continúa teniendo validez: EL CENTRO DE NUESTRO PUEBLO SE MUERE. Agoniza su voz y entre susurros nos pide ayuda a todos los fontaniegos y fontaniegas. ¡Salvadme!
Es un proyecto ambicioso en su contenido y muy positivo y realizable en forma, con un presupuesto que se puede asumir. Otros pueblos lo han realizado siendo más pobres y con menos habitantes. Cómo no va a poder hacerlo Fuentes. Está en nuestras manos y no hacerlo sería una traición a nuestro pueblo. Adelante.
