Esta semana ha sido intensa para los movimientos de la Memoria Histórica de Andalucía. En gran parte del país han surgido iniciativas políticas que pretenden hacer desaparecer no solo el movimiento memorialista, sino todo lo que huela a memoria democrática. Es como si quisieran arrancar una etapa de nuestra historia, ocultándola con mentiras. La historia es la que es y así tenemos que asumirla. Querer ocultar lo que no nos gusta es hacer una historia a la carta de cada uno y, por lo tanto, eso ya no es historia.

La Asociación de la Memoria Histórica Fontaniega en los días 14 y 15 de junio ha realizado diversas actividades para honrar un año más a los luchadores por la libertad. Así, este sábado los alumnos y alumnas de 1º, 2º y 3º del IES Alarifes Ruiz Florindo han pintado dos murales para conmemorar el día Andaluz de la Memoria Histórica y Democrática de Andalucía. Por la tarde se proyectó la película “El Maestro que prometió el mar” en el Centro de Interpretación del Barroco.

Este sábado se ha celebrado el acto central de la conmemoración del día en el parque de los Luchadores por la Libertad con el izado de la bandera republicana y la interpretación del himno de Riego, seguido de una disertación sobre las víctimas, la resistencia ante el golpe militar y la dictadura. Poco después, se ha recorrido el parque para ver los murales y recibir una breve explicación de ellos. El acto ha concluido con la intervención del cantautor Paco Narváez y con un brindis republicano en honor a las víctimas y a la lucha por la libertad.

Tras el levantamiento del ejército en España contra la República en el año 1936 se produjo la aparición de dos Españas, la del levantamiento y la de los defensores del estado legal establecido, el republicano. Tras el triunfo de los sublevados, los derrotados fueron cruelmente perseguidos y maltratados. Los ganadores no supieron o no quisieron actuar como “hermanos” en una nueva sociedad con los vencidos, los otros, los “rojos” como los llamaban. Deportaciones, campos de concentración, trabajos forzados, persecución y, sobre todo, señalamiento en el seno de la sociedad donde cada uno vivía. A muchos hombres y a muchas mujeres se les colgó su “sambenito” durante muchos años, 36 concretamente.

Ahora, muchas instituciones y organismos, sobre todo en las comunidades donde gobiernan los partidos de derecha junto a la ultraderecha, quieren saltarse las leyes sobre la Memoria que existen, tanto comunitarias como nacionales. Quieren hacer unas nuevas “de la concordia”, dicen. Concordar significa conciliar, pero para conciliarme con otras personas y otras ideas tenemos que reconocer nuestro pasado y el de los otros y asumirlo tal cual es. Entonces y sólo entonces podremos asumir la concordia y la reconciliación. Hay que valorar la verdad como verdad y no enmascararla con mentiras o medias verdades.

Ante estas pretensiones, los movimientos memorialistas andaluces se han puesto las pilas y desde todos los rincones de nuestra geografía comunitaria han surgido voces y actos para poner luz una vez más a nuestra historia y exigir a los gobernantes municipales, provinciales y autonómicos el respeto y el cumplimiento de la Ley de Memoria Histórica y Democrática de Andalucía.

Esta semana ha sido intensa en actos reivindicativos o de exaltación a los que fueron víctimas de la sublevación y cuya memoria reclaman todas las asociaciones de la memoria. Así, el miércoles, 12 de junio, CCOO y el Foro por la Memoria de Córdoba organizaron una concentración en la sede de la primera para exigir al ayuntamiento de Córdoba que abra las fosas a los centros educativos de la ciudad para que los jóvenes construyan valores democráticos y antifascistas, y conozcan cual fue el precio de la libertad que ahora viven y a veces no valoran.

Por otro lado, la Casa de la Memoria de La Sauceda, de Jimena de la Frontera, sigue aumentando su biblioteca sobre la memoria del Campo de Gibraltar y en el mes de mayo ha ingresado y catalogado 545 ejemplares en ella. Las organizaciones memorialistas de Sevilla han celebrado un acto en la plaza Nueva, el día 14 como recuerdo y homenaje a las víctimas del golpe militar y la dictadura franquista. En ella intervinieron Lucía Socam, Paco Narváez y Susana Falcón. El Manifiesto fue leído por Juan Manuel Guijo.

A eso se une que la Asociación por la Memoria Militar Democrática (AMMD), formada por militares de diferentes graduaciones y situaciones administrativas y que se constituyó para honrar y rescatar la memoria de los militares que fueron leales a su juramento de fidelidad a la II República y que se mantuvieron firmes en la lucha contra el golpe de estado y las fuerzas rebeldes durante la guerra de España, el 14 de junio, ha celebrado, en colaboración con el Ateneo Científico, Literario y Artístico de Madrid, un acto  público. En él ha participado Floren Dimas, investigador histórico militar para disertar del “acceso a los archivos militares como una exigencia de transparencia”. Junto a él han estado el magistrado José Antonio Martín Pallín, el abogado Eduardo Ranza que ha hablado de los aspectos jurídicos de las reivindicaciones de la AMMD y el profesor se sociología Pedro García Bilbao.

Los colectivos memorialistas de Sevilla han protestado este viernes ante el rectorado de la universidad hispalense y ante el ayuntamiento para mostrar sus reivindicaciones con motivo del Día de la Memoria Democrática en Andalucía. Ante el rectorado para exigir al rector, Miguel Ángel Castro, la retirada inmediata de la infame inscripción en honor al “Duce Franco” que aún hoy puede verse en el patio del rectorado y el reconocimiento al alumnado, profesorado y personal de administración y servicios de esa universidad represaliados durante la dictadura. Ante el ayuntamiento para denunciar la parálisis de las políticas de memoria y la inacción de los gobiernos del PP en Sevilla y en Andalucía. También las asociaciones memorialistas de Cádiz han organizado diferentes actos de protesta para seguir reivindicando nuestro lema “Memoria, reparación y libertad”.