Lo da todo. Pero no quiere hablar de su vida personal. Andrés Moscoso, "aguaó" de la Borriquita y de Jesús Nazareno, prefiere que la gente lo conozca por lo que hace, no por lo que dice. Abre y cierra la Semana Santa desde el modesto papel de acarrear agua a los costaleros. ¿Modesto? Fundamental. Solemne, serio, va detrás del paso acunando la botella de agua para los costaleros. Como también le gusta la broma, pregunta cuánto va a cobrar por la entrevista. Por lo menos 50 euros, reclama. Tuerce el gesto cuando oye que no hay dinero de por medio. Después, a la hora de las fotos, reclama cien euros. Admite todas las preguntas menos las que se refieren a su vida íntima. Se guarda los sentimientos y los pensamientos. Dice que son suyos y de nadie más. Nació en Sevilla hace 24 años. Su madre era de Fuentes y su padre de Écija. Vive con sus tíos.
Pregunta.- Todo Fuentes sabe quién es Andrés, pero ¿crees que te conocen realmente?
Respuesta.- Sí me conocen mis amigos. Tengo muchos amigos y soy un hombre feliz porque todo me gusta. Lo que más me gusta es la Semana Santa y ser "aguaó" y costalero. Este año salgo con la Borriquita y con el Santo Entierro. Aporto mucho desde la poca cosa que es darle agua a los costaleros que tienen sed. Con el agua les doy fuerza para seguir llevando el paso. Cuando se me acaba el agua voy a un bar y la relleno y así hasta que termina la procesión. Me dan las gracias y cuando voy de costalero soy el que da las gracias. Me gusta más ayudar que ser ayudado.
P.- ¿Capillita, siempre detrás del Cristo?
R.- Sí, mucho. A veces voy detrás, pero otras voy delante o al lado. Eso no importa. Delante voy pocas veces.
P.- Participas muy activamente en la plataforma de ayuda al pueblo ucraniano. ¿Qué opinas de lo que está pasando?
R.- Que hay que ayudar a los que huyen de la guerra. Ellos no tienen culpa de nada. El malo de Putin. Ni siquiera los soldaros rusos tienen culpa de esta guerra. Ellos obedecen a sus jefes porque saben que si no lo hacen los matan. Ahora ocurre lo mismo que Franco hizo con España, una guerra muy mala. Hay que pararle los pies a Putin, aunque yo no sé cómo se hace eso. Lo que sé es que tenemos que ayudarle a los que vienen huyendo porque un día podemos ser nosotros los que tengamos que huir.
P.- ¿Ayuda más el que tiene más?
R.- No, ayuda el que quiere ayudar. Hay muchos que no tienen nada y ayudan y quienes tiene mucho ayudan poco. Pero todos somos humanos y nuestra obligación es ayudar al que lo necesita, sea de donde sea. Yo doy porque soy así, no porque tenga mucho o poco.
P.- ¿Sólo se necesitan buenos sentimientos?
R.- Sí, ganas de ayudar. Yo de mis sentimientos no hablo. Me los guardo porque son míos y sólo míos.
P.- A veces es bueno expresar los sentimientos y los pensamientos.
R.- Yo no lo hago. Mi intimidad es sólo mía. La gente puede verme por fuera, pero por dentro me veo sólo yo y mis amigos. Lo único que puedo decir es que soy un hombre feliz porque me gusta mucho todo, lo que más la Semana Santa y salir de "aguaó" y de costalero. Me gusta el fútbol, el voleibol y el baloncesto. Pero sobre todo soy capillita.