La guardería rural, uno de los servicios municipales mejor valorados por la gente del campo, entra en fase de recuperación de la normalidad después de una larga crisis provocada por la falta de vehículo y por la jubilación de uno de los dos agentes, Cristóbal Peñaranda. Esta semana está prevista la firma del contrato de compraventa de un todoterreno Mitsubishi (En la foto), así como la contratación temporal de dos guardas, uno en sustitución del jubilado Cristóbal Peñaranda y otro que supla las vacaciones de Miguel Osuna. El ayuntamiento solicitó la semana pasada al Servicio Andaluz de Empleo (SAE) cinco candidatos, entre los que seleccionar a los dos agentes, que recibirán una formación acelerada durante la semana previa a las vacaciones de Miguel Osuna.

La causa principal de la crisis sufrida en los últimos meses por el servicio fue la avería irreparable del vehículo anterior, contratiempo que fue solventado temporalmente gracias a la colaboración de la cooperativa Nuestra Señora del Rosario, que cedió un coche durante 45 días mientras el ayuntamiento adquiría otro medio de transporte para los guardas. Sin embargo, los 45 días terminaron sin que el ayuntamiento diera con una solución y, además, llegó la fecha de jubilación de Cristóbal Peñaranda. Quedó en activo un único guarda, Miguel Osuna, pero sin posibilidad de moverse por los caminos. Las quejas de los agricultores este arranque del verano han sido muchas y los robos en las fincas y cocheras, bastantes. Los equipos de riego están a pleno rendimiento y, sin apenas vigilancia, son muy golosos para los amigos de lo ajeno.

Finalmente, parece que el problema entra esta semana en vía de solución con la compra de un vehículo que, a pesar de los años que acumula, está en buen estado, según el ayuntamiento. El acuerdo con el propietario está cerrado y a falta sólo de firma del contrato de compraventa. Su precio es de 8.000 euros, más IVA, y la cooperativa Nuestra Señora del Rosario se muestra dispuesta a colaborar en la compra, aunque pide hacerlo conjuntamente con la otra cooperativa y con otras empresas agrícolas que también se benefician del servicio de la guardería. Además de la firma del contrato, el vehículo está a falta sólo de la rotulación y la instalación de las luces de emergencia.

En cuanto a los dos agentes previstos, el ayuntamiento asegura que la contratación será inmediata para que se incorporen antes de la marcha de vacaciones de Miguel Osuna. Lo contratos serán temporales hasta que salga la convocatoria pública de consolidación y acceso a las plazas de plantilla. Los candidatos tienen que estar habilitados por el ministerio del Interior, según la ley de seguridad privada y conocimiento del terreno. La crisis ha puesto de manifiesto que el servicio se echa de menos por parte de los agricultores, hasta el punto de que algunos han propuesto una colecta para la adquisición de un vehículo acorde con las necesidades y con los beneficios, tanto económicos como de tranquilidad en el campo. No es un servicio que abunde precisamente en los pueblos del contorno.