"Fuentes es un puñal que llevo clavado en el alma, es mi vida, son mis raíces"

Mercedes Ruiz Parrado "Chamarina" es hija de Pepe Chamarín y Julia la Juanica. Es la última de nueve hermanos y se crió en el número 11 de la calle Pozo Santo (calle Hurtado). La necesidad de buscar trabajo llevó a la familia a abandonar Fuentes cuando ella tenía once años. Actualmente vive en Benidorm. Nació el 9 de abril de 1964. O sea que lleva en Benidorm "una pila de años". Copiando a los de Bilbao, que suelen decir que los bilbaínos nacen allí donde les da la gana, de los emigrantes de Fuentes podría decirse que viven en Fuentes estén donde estén. Mercedes la Chamarina retomó hace poco sus raíces fontaniegas gracias a un reencuentro de antiguos alumnos del colegio Santa Teresa y decidió dejar su mente aquí para siempre. Como otros muchos fontaniegos y fontaniegas, lleva un montón de años fuera, pero vivir, vive en Fuentes. Porque a ver quién le quita a un fontaniego la ilusión de vivir donde sueña.

Pregunta.- ¿Por qué salisteis de Fuentes?

Respuesta.- Mi madre, Julia la Juanica, se fue de Fuentes para buscar trabajo, como tantísimas familias que se vinieron a Benidorm. Tuvo 9 hijos, de los que tres fallecieron pequeños. Quedamos cuatro hombres y dos mujeres. Mi madre, que se había llevado once años yendo y viniendo de Francia, se cansó de pasear las maletas. Entonces se escuchaba que en Benidorm había mucho trabajo y efectivamente así era. Tanto era así que el mismo día que llegamos o al día siguiente ya estábamos todos trabajado. Todos menos yo, claro, que era una niña aun. Así que ese fue el motivo. Había que alimentar a muchos churumbeles. Nuestra historia es la misma de tantos fontaniegos.

P.- ¿Cómo fue tu infancia en Fuentes?

R.- Recuerdo los molletes y aquellos baños que me daba mi madre cuando le echaba alhucema a la ropa. Aquel olor de la ropa se me quedó prendido en la memoria, aunque ya no lo he vuelto a sentir nunca más. De niña me iba a la escuela con mi amiga Rafi Elena. Era el colegio Santa Teresa. Y Chari y Manoli. Después de treinta o cuarenta años he vuelto a ver a aquellas amigas gracias al grupo de wahtsapp que creaste, Negro. Ten en cuenta que me fui de Fuentes muy joven, me hice a la vida en otro sitio, me casé, tuve una hija... En fin, la vida sigue. Volver a retomar mi infancia ha sido lo mejor que me ha pasado. Tengo una casa en Fuentes y volver con mis amigas de la infancia ha sido como sanar una herida que ha sangrado muchos años. Fuentes es un puñal que llevo clavado en el alma, es mi vida, son mis raíces.

P.- ¿Y tus primeros años en Benidorm?

R.- Mi madre, Julia la Juanica, era una mujer tan fontaniega que nos inyectó a los nueve hijos Fuentes de Andalucía en las venas. Teníamos a Fuentes en casa. Hay quien vive en una casa de Fuentes. Nosotros teníamos a Fuentes dentro de la casa de Benidorm. Con 14 años empecé a trabajar en una tienda de costura y luego de dependienta en otra tienda. Más tarde me coloqué de camarera en el restaurante de un hotel y allí sigo hasta el día de hoy.

P.- ¿Cómo es tu trabajo?

R. Trabajo en un restaurante situado casi en primera línea de playa. Aquí hay poca calidad de vida. En temporada alta sólo ves trabajo, trabajo y trabajo. Hasta que echas la temporada, a piñón. Luego, en invierno es otra cosa. Tengo más tiempo para mí. El día de descanso me voy a la playa o salgo con las amigas y, si mi hija está aquí, salgo con ella. Cuando llega febrero tiro para Fuente a disfrutar de mis carnavales, mi grandísima fiesta de los carnavales. Amo tanto el carnaval que estoy deseando estar allí con todos mis amigos y disfrutar de él. En Benidorm suelo trabajar ocho meses y en los otros cuatro es cuando lo dedico a mí. O sea, que entonces es cuando tengo calidad de vida.

P.- Dices que sueles pasar tiempo con tu hija Patricia, pero "cuando está aquí..."

R.- Sí, Patricia está en Nuevo México trabajando como actriz de teatro terapéutico y telenovelas. Ella es psicoterapeuta y actriz. Su nombre es Patricia Aroa. Trabajó en el Centro del Actor de Madrid, donde consiguió un beca para estudiar en Nuevo México Psicoterapia Gestalt. (Es una filosofía y una forma de vida “relacionada con la búsqueda espiritual, con el reencuentro con la libertad y la naturaleza de uno mismo”). Lleva allí cinco años. Imparte talleres de su especialidad y lo combina con trabajos como modelo y en series de telenovelas de Televisa. La principal seria en la que trabaja es "La rosa de Guadalupe", que lleva doce temporadas en antena y es uno de los programas más vistos de Latinoamérica.

P.- ¿Con qué frecuencia vienes a Fuentes?

R.- Pues como antes te dije, suelo ir en carnavales, pero estoy un mes o mes y medio porque en Benidorm acaba la temporada en noviembre, más o menos. De camino a Fuentes voy como loca. Fuentes es mi pasión.

P.- ¿Qué te gusta de Fuentes, qué te hace seguir viniendo?

R: Pues me gusta la gente de Fuentes, nuestra forma de ser y que no encuentras en otra parte. Me gusta el cariño que encuentro en todos mis amigos y en todas mis amigas. Me siento muy querida. En un sitio como Benidorm eso no lo hay, no lo encuentras. Te encuentras con el vecino de enfrente y no lo conoces. En cambio, en Fuentes me encuentro muy a gusto, muy querida y llena de felicidad.

P.- ¿Qué echas de menos de Fuentes?

R.- Echo de menos mucho su fiesta. Como me vine muy nueva, la romería no la conozco. Es una pena no haber podido disfrutarla. Aquí en esas fechas es temporada alta, así que no puedo pedir días de fiesta. También echo de menos nuestra feria, que no la veo desde que tenía 20 años. Realmente, por mi trabajo sólo vivo el carnaval, del que estoy muy orgullosa y lo disfruto a tope. En el carnaval encuentro mi calidad de vida. Para mí Fuentes es sinónimo de calidad de vida, el pueblo de la gente maravillosa.

R: ¿Qué te gustaría decirle a la gente de Fuentes?

R.- Me gustaría decirle a la gente que los que estamos fuera estamos por necesidad, por trabajo, pero en la sangre llevamos a nuestro pueblo. Que somos tan fontaniegos puros y duros como vosotros. Yo tengo envidia sana porque en Fuentes tenéis mucha calidad de vida. Para terminar me gustaría que nombraras a algunos de mis amigos, como Meli, las hermanas Rafi y Conchi, el Negro y su mujer. Y sobre todo a mi otra hermana, aunque no de sangre, Carmen la Reparita. ¡Ea, eso es todo! ¡Ya mismo estoy otra vez en Fuentes!