Demasiados pasajeros para tan poco autobús. Viajar a Sevilla los domingos por la tarde en autobús se ha convertido en una incógnita. ¿Llegaré o no llegaré a Sevilla? ¿Vendrá otro autobús a recoger a los pasajeros que no quepan en el que pasa por Fuentes a las 19:45? ¿Tendré que volver a casa a esperar el autobús de la mañana? Se está convirtiendo en costumbre que algunos pasajeros se queden en tierra porque el autobús llega a Fuentes lleno o casi lleno después de recoger pasajeros en Écija, El Campillo, Cañada y La Luisiana.
Los estudiantes que pasan el fin de semana en Fuentes son los más afectados por esa falta de plazas del autobús del domingo por la tarde. Los otros días de la semana no hay problema de plazas. Los domingos sucede que vuelven a Sevilla muchos estudiantes de pasar el fin de semana con sus familias. Con la maleta llena de ropa limpia y tápers con la comida de mamá para la semana. Pero no sólo estudiantes. Isabel vive en Lebrija y viene a Fuentes un fin de semana sí y otro no a cuidar de su madre enferma. Y el domingo tiene que llegar a Sevilla antes de las 22h para coger el tren que va a Lebrija.
Isabel se ha tenido que quedar un domingo en Fuentes por culpa de que el autobús llegó lleno y otro domingo perdió el tren porque tuvo que esperar un segundo autobús porque el primero no tenía plazas. Eso le supone un enorme trastorno. Para intentar que no le pase más opta cada domingo con irse a la parada del autobús casi una hora antes. A las siete de la tarde ya está sentada en los bancos de la parada. De esa forma sabe que, aunque haya una única plaza libre en el autobús, será suya. Porque desde que empezó este problema los pasajeros piden la vez al llegar a la parada.
Julio Miranda, estudiante de Administración y Gestión de Empresas, se ha quedado en tierra dos domingos, uno de ellos el día 13 de este mes. Para Julio, eso supone perder la primera clase del lunes en la universidad porque tiene que esperar al primer autobús de la mañana siguiente. Su primera clase en la facultad de Económicas empieza a las 8 de la mañana. Julio echa en cara a la empresa Mombús, titular de la línea, que coja el dinero de la subvención que recibe de la Junta de Andalucía por prestar el servicio y olvidarse de los pasajeros. El billete del viaje cuesta 5,97 euros. No hay posibilidad de sacar billete por internet, algo que sería útil para saber al menos que tienen reserva y a la empresa para conocer la demanda al momento. Billetes, sólo pagando al conductor y en efectivo.
Antes ponían otro autobús cuando había más pasajeros que plazas, pero ahora los conductores de encogen de hombros y dicen que ellos no tienen culpa, que reclamen a la empresa o al ayuntamiento. El problema de los estudiantes para reclamar al ayuntamiento es que pasan la semana en Sevilla y llegan a Fuentes el viernes por la tarde, cuando las oficinas están cerradas. Cada noche de domingo suelen coger el autobús a Sevilla entre diez y quince estudiantes. Otros muchos van en coche o los lleva algún familiar. Nadie tiene una cifra aproximada de cuántos fontaniegos y fontaniegas estudian en Sevilla. "Vamos muchos, pero no sabemos cuántos", dicen algunos de los consultados.
El alcalde de Fuentes, Francisco Martínez, asegura que es conocedor de la situación y que ha llamado a la jefa de servicio de Transportes de la Junta de Andalucía, María de Arcas Hernández, que se ha comprometido a estudiar el caso y a hablar con la empresa concesionaria de la línea. Las anteriores empresas concesionarias, Linesur y Valenzuela, fueron cambiadas también por problemas en el servicio. Varios pasajeros habituales han dicho este periódico que el servicio de Mombús va por el mismo camino que las anteriores. "Esto es una vergüenza, cada vez peor", han protestado en la parada. "Cobran para dar un servicio público y lo que hacen es servir a sus intereses económicos", aseguran.
Por su parte, el portavoz de la empresa Mombús, Ricardo Martín, ha dicho a Fuentes de Información que sólo le consta una incidencia de ese tipo, precisamente el domingo 13 de marzo, cuando Julio Miranda se quedó sin plaza en el autobús de las 19:45 y reclamó en la oficina de Mombús del Prado de San Sebastián. La empresa asegura que ha habido una "incidencia ocasional" y que está "monitorizando" la línea para ver qué problema tiene. No le consta más que una queja, la del día 13, y que eso no le parece suficiente para cuestionar la calidad del servicio en su conjunto. Si los pasajeros se abstienen de poner reclamaciones, la empresa no puede saber que tienen problemas, viene a decir el portavoz de Mombús. Un posibilidad que baraja la empresa, si persiste el problema, es aumentar la capacidad del vehículo que realiza la línea Écija-Sevilla o poner otro autobús de refuerzo los domingos a esa hora. "Si hay que reforzar, se refuerza", concluye Ricardo Martín.
El domingo pasado no hubo problema y la decena de pasajeros pudieron viajar a Sevilla. A ver qué ocurre esta tarde. Lo seguro es que mucho tiempo antes de que sean las 19:45 habrá pasajeros guardando cola por temor a quedarse sin plaza. Especialmente los estudiantes porque suelen ir con maleta y les pasa con demasiada frecuencia que mientras ellos colocan el equipaje en los bajos del autobús, los pasajeros sin bultos suben directamente y ocupan las pocas plazas disponibles. Como cada domingo, Julio Miranda estará temprano en la parada. ¿Conseguirá llegar a Sevilla este domingo?